Es un monte de gran extensión que se encuentra a unos 6 kilómetros de Palencia. En este lugar, se puede disfrutar de tiempo libre y de una gran cantidad de actividades de ocio. Entre ellas, destaca la práctica de senderismo, los deportes con bicicleta, o la observación de especies vegetales y animales, destacando la importante reserva de ciervos.
En 1191, fue vendido por el rey Alfonso VIII a la ciudad y al Cabildo de la Catedral. Su gran extensión, permite disfrutar de su entorno paisajístico rodeado de especies de animales y vegetales, como son los enclaves de Vallejuelos, Cigarral y Buentrigo. También permite divisar sus magníficas vistas panorámicas, como es el Valle de San Juan o la Casa Pequeña, que fue construida en el siglo XVIII y aguarda un precioso mirador. Además de la Casa Pequeña, se encuentra la Casa Grande, se trata de unas instalaciones hosteleras construídas en un edificio del siglo XVI en las que se encuentran unas pistas deportivas y unos circuitos de mantenimiento físico, clasificados según el grado de dificultad, para que sean aptos para el disfrute y la práctica del ejercicio o el paseo de visitantes de todas las edades.
La zona más frecuentada por los palentinos es el Refugio, ya que es la que tiene más fácil acceso, incluso por medio del servicio de autobuses urbanos. Allí, se encuentra un bar-restaurante, unas piscinas municipales, y un amplio merendero al aire libre. Además, resulta fácil acercarse hasta el parque reserva de ciervos, en el que la abundancia de animales y la facilidad de verlos a corta distancia siempre hace las delicias de los más grandes y de los más pequeños.
Más datos en:
www.aytopalencia.es
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