El penúltimo domingo del mes de mayo se realiza este tradicional Descenso de Nabatas que, partiendo de la localidad de Laspuña, recorre el río Cinca hasta llegar a Aínsa. Es una celebración que rinde homenaje a los antiguos nabateros que construían este tipo de embarcaciones para transportar troncos de madera desde la montaña hasta el llano.
Nabatas es el nombre que reciben en Aragón las almadías, un medio de transporte fluvial de madera. Antiguamente, en esta temporada, se aprovechaba la época del Mayenco (crecida del río por el deshielo de la nieve) y todos los ríos pirenaicos se llenaban de nabatas para el transporte de los árboles cortados en los bosques. Los troncos, arrastrados desde el bosque hasta la orilla del río, se ataban con palos de sarga remojados y retorcidos, formando una especie de balsa con algunos remos delante y detrás, para conducir la nabata río abajo.
En la actualidad, se prepara la nabata de la misma manera que se hacía tradicionalmente, y se desciende hasta la cercana localidad de Aínsa, capital de la comarca del Sobrarbe. Pero además del Descenso de Nabatas, se organiza otra serie de actividades que completan el programa: exposiciones, charlas, recorridos, visitas al Museo de las Nabatas y la Madera, almuerzo nabatero antes del descenso, comida colectiva posterior, entre otros actos.
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